Nuestro compañero Richard nació tal día como hoy. Seguramente fué un gran día para su familia, sus padres estaban de enhorabuena por el nacimiento de su hijo, a la vez que celebraban las fiestas navideñas.
Hoy, Richard está de cumpleaños, y es un día difícil para él. Esta mañana, conversando telefónicamente con él, pude comprobar que estaba hundido, me explicó el estado de su padre, y lo difícil que és, el querer estar instantáneamente a tantos miles de kilómetros y no poder. Pero, su cabeza y su corazón están allí. Su padre mejorará, y el día que el pueda verlo, tendrá la alegria y felicidad que le está faltando hoy.
Richard:
Tus compañeros y amigos del SANTA EULALIA (compañeros de Veteranos, Juveniles, directivos, delegados y demás) estamos contigo en este delicado momento. Siempre has demostrado que eres un hombre luchador y capaz de afrontar las adversidades en el deporte y en la vida. Tu entrega, es muestra del aguante y de la capacidad que tienes para vencer los malos momentos.
Sabes que estamos para todo lo que necesites, no dudes en llamarnos para lo que sea. Esta noche, es para todos una noche de reunión, donde no faltarán las buenas comidas y las bebidas. Son, este tipo de noches, propensas al buen humor, alegría y a pasarlo bien. De la misma manera que será inevitable que con nuestras familias, hagamos todo lo posible por pasarlo bien, no evitaremos tampoco, entre copa y copa de cava, tener un pequeño rincón de nuestras cabezas, donde estará nuestro amigo Richard, el Uruguayo, que lo está pasando mal.
Estamos contigo, mucho ánimo. Te enviamos toda la fuerza que necesites para que lo lleves, en la medida de lo posible, con el menor sufrimiento.
Hoy no es día de hablar de tus cualidades como jugador o entrenador que las tienes y muchas. Hoy es día en el que todos nos sentimos un poco Uru porque es duro cuando ocurren estas cosas por Navidades y todavía mas si estás de cumpleaños.
Recibe de parte de todos tus amigos del SANTA EULALIA, un fuerte abrazo con todo el cariño de el mundo, que lo tienes más que merecido.
ÁNIMO
Santa Eulalia